15 de abril de 2008

EL ABUELO

Voy a decir para ustedes,

con cariño y humildad,

una corta poesía

basada en la realidad.



Recuerdo siendo pequeño,

igual que todos ustedes,

teníamos un gran respeto,

sin tener tantos placeres.



Entonces era sagrado

contestar a los mayores,

que con mucha educación

cumplíamos los menores.



Fuimos muy pocos al colegio,

hay que decir la verdad,

pero si nos enseñaron

a tener que respetar.



Ahora estudian muchos años,

tienen que tener cultura,

pero tocante al respeto,

no hay ninguna asignatura.



Y debieran de tenerla,

sépanlo los profesores,

que bien merece un suspenso

quién contesta a los mayores.



Los nietos a los abuelos

los quieren cuando son niños,

pero según van creciendo

se va mermando el cariño.



Por la mañana temprano,

dicen muy fuerte y sin duelo,

no hay quién duerma en esta casa,

por las toses del abuelo.



Ay!, juventud del presente,

pensad ya, pues en el futuro,

que abuelos tendréis que ser,

y Dios quiera que a vosotros,

vuestros hijos y los nietos,

os sepan mucho querer.



A muchos seres les pasa

todo lo que estoy diciendo,

que Dios se lo tenga en cuenta,

lo mucho que están sufriendo.



Y me despido de ustedes

con lágrimas en la vista,

y les doy un fuerte abrazo

a todos los Pensionistas.

10 de abril de 2008

TUS HIJOS

Tus hijos no son tus hijos,

son hijos e hijas de la vida,

deseosa de sí misma.

No vienen de ti, sino através de ti,

y aunque estén contigo,

no te pertenecen.

Puedes darles tu amor,

pero no tus pensamientos, pues,

ellos tienen sus propios pensamientos.

Puedes abrigar sus cuerpos,

pero no sus almas, porque ellas,

viven en la casa del mañana,

que no puedes visitar,

ni siquiera en sueños.

Puedes esforzarte en ser como ellos,

pero no procures hacerlos

semejantes a ti,

porque la vida no retrocede

ni se detiene en el ayer.

Tú eres el arco del cual tus hijos,

como flechas vivas son lanzados.

Deja que la inclinación,

en tu mano de arquero,

sea para la felicidad.

7 de abril de 2008

EQUIVOCO SUCEDIDO EN INGLATERRA




Una familia veraneaba en Escocia, ve una casa de campo y deciden comprarla. Después de haberla visitado, no recuerdan donde estaba el W.C. y entonces escriben al señor Vicario, quién fue que les enseñó la vivienda, preguntándole donde se encontraba dicho lugar. El vicario que desconoce el término W.C., para designar dicho lugar, lo confunde con la WELLESLEY CHAPEL (capilla anglicana) y les contesta en los siguientes términos, que producen el mayor asombro en el matrimonio;

“Queridos Señores:
Tengo el gusto de comunicarles que el servicio que ustedes me preguntan, está el más cercano de esta demarcación a once kilómetros de la casa. Es algo molesto si tienen que ir con frecuencia, pero les agradará saber que mucha gente se lleva la comida y permanecen en el lugar todo el día.
Caben trescientas personas sentadas y quinientas de pie. El Comité ha decidido instalar asientos de terciopelo para mayor comodidad, los que disponen de tiempo suficiente van a pie y otros en trenes llegados en el momento justo y preciso.
La última vez que estuvo mi esposa, se vio obligada a permanecer de pie durante todo el acto y sólo pudo sentarse unos minutos con gran estrechez. Yo no voy casi nunca, pues yo efectúo mis actos en mi vicaría.
Hay asientos especiales para las damas, las cuales están presididas por el Sr. Ministro de Educación y otras jerarquías que le prestan ayuda precisa y asistencia en todos los momentos.
Los niños, cada uno con su papel, se sientan todos juntos y por separado de los mayores, cantando a coro bellas melodías mientras dura el acto, al final del cual tienen que devolver el papel que se les entregó al entrar.
En espera de haberles atendido su petición, les remite un cordial saludo, atentamente… EL VICARIO.”